Según un informe publicado por el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU), los voluntarios juegan un papel fundamental a la hora de que los gobiernos rindan cuentas y se responsabilicen ante los ciudadanos. Sin embargo, aún no se valora suficientemente su potencial. El Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2015 es el primer estudio mundial de la contribución de los voluntarios a una mejor gobernanza, un requisito previo para la consecución de los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que se acordarán el próximo mes de septiembre en las Naciones Unidas.
Según un informe publicado por el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU), los voluntarios juegan un papel fundamental a la hora de que los gobiernos rindan cuentas y se responsabilicen ante los ciudadanos. Sin embargo, aún no se valora suficientemente su potencial.
El Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2015 es el primer estudio mundial de la contribución de los voluntarios a una mejor gobernanza, un requisito previo para la consecución de los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que se acordarán el próximo mes de septiembre en las Naciones Unidas.
A partir de testimonios recopilados de países tan diversos como Brasil, Kenya, Líbano o Bangladesh, el informe de la ONU, titulado Transformar la gobernanza, muestra cómo gente corriente dedica su tiempo, su energía y sus capacidades de forma voluntaria para mejorar el modo en el que están gobernados a nivel local, nacional y mundial.
Los voluntarios trabajan con gobiernos y la sociedad civil para exigir a aquellos que están en el poder que sean responsables y rindan cuentas, para influir en políticas y leyes y para representar las voces de aquellos que, a menudo, se quedan fuera de la toma de decisiones sobre el desarrollo. Según el informe, el resultado final es un desarrollo más inclusivo y, de ese modo, más efectivo.
“Al crear entornos favorables para que las personas aporten su tiempo de forma voluntaria, es posible usar sus capacidades y conocimientos para el bien común dentro de la esfera de la gobernanza” afirma Richard Dictus, Coordinador Ejecutivo del programa VNU. “El cambio tendrá lugar con una mayor participación cívica que ampliará el número de personas que tienen voz, quienes pueden participar y quienes pueden exigir responsabilidad y rendición de cuentas a aquellos actores de la gobernanza.”
En el mundo, más de un billón de personas presta servicio como voluntarios, la mayoría en sus países de procedencia. Muchos de ellos lideran los esfuerzos para mejorar la forma en la que ellos mismos, y sus conciudadanos, están gobernados.
El informe incluye, entre otros, los siguientes ejemplos:
• Observadores sociales en Brasil. Se trata de grupos de ciudadanos que supervisan los contratos que firma la ciudad para evitar así la corrupción, lo que ha ahorrado millones de dólares de los fondos públicos;
• Campañas regionales en el mundo árabe que desafían a las leyes que impiden a las mujeres casadas con extranjeros que pasen su nacionalidad a sus hijos;
• El movimiento global que ha exigido un acuerdo para regular las condiciones de los trabajadores de la industria textil, como consecuencia del derrumbamiento del edificio de la Plaza Rana, en 2013, en Bangladesh.
El Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2015 explica que existe un acuerdo generalizado a partir del cual los futuros esfuerzos de desarrollo deberán incluir enfoques radicalmente diferentes para poder involucrar a las personas en el propio desarrollo, el de sus comunidades y el de sus países.
Así como los Objetivos de Desarrollo del Milenio acordados por los gobiernos en 2000 supusieron una fuerza aglutinante alrededor de objetivos claramente definidos, en algunos asuntos el resultado se ha quedado corto porque los esfuerzos de desarrollo de los países no han reflejado suficientemente las necesidades de todos los ciudadanos, según el informe.
Los nuevos ODS para después de 2015, que se acordarán en las Naciones Unidas en septiembre, sólo se lograrán si en ellos se incluyen las voces de todas las personas, y si se buscan maneras más efectivas de involucrar a las comunidades que incluyan el poder de los voluntarios y el voluntariado.
En el discurso del lanzamiento del informe, la Administradora del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Helen Clark, destacó “el enorme potencial de los voluntarios para crear un desarrollo realmente centrado en las personas pero que aún no ha sido totalmente aprovechado.
Los ODS se alcanzarán gracias a la participación de todos los sectores de la sociedad. Los voluntarios juegan un papel determinante a la hora de representar las voces de aquellos a menudo excluidos de la toma de decisiones sobre el desarrollo, especialmente las mujeres y otros grupos marginados.”
El informe muestra cómo los países que proporcionan un entorno favorable a los voluntarios tienden a cosechar los frutos de la inclusión de éstos en la toma de decisiones, y elogia a los gobiernos de Perú, Mozambique y Noruega, por citar tres ejemplos, por haber aprobado leyes y haber fijado marcos para formalizar la contribución de los voluntarios.
No obstante, también afirma que muchos otros gobiernos no están sabiendo reconocer ni impulsar el inmenso potencial de los voluntarios para conseguir un camino al desarrollo más próspero. El informe hace también una llamada a los gobiernos para que vayan “más allá de la participación retórica” y propongan actuaciones concretas para permitir que el voluntariado de todo el mundo pueda contribuir de forma activa en la toma de decisiones que afectan directamente a las personas.
Estas actuaciones incluyen:
• Involucrar a más voluntarios en el proceso de diseñar políticas y llevarlas a la práctica;
• Integrar a los voluntarios formalmente en los marcos de desarrollo nacionales y en las estrategias de los ODS;
• Incluir en el voluntariado a más mujeres, y otros grupos marginalizados, para la toma de decisiones a nivel local y nacional.
El objetivo del Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2015, según el programa VNU, es iniciar un diálogo a nivel mundial acerca del papel de los voluntarios en la gobernanza, un ámbito crucial para el éxito del desarrollo en los años venideros.
También se han planificado otros lanzamientos de alto nivel en Kenya (19 de junio), India (23 de junio), Panamá (septiembre), Bahréin y Japón (octubre) y Senegal.
Podrá leer la version completa del Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2015 en ingles, francés y español en www.volunteeractioncounts.org/SWVR2015.
Para más información, lea el editorial de Richar Dictus, Coordinador Ejecutivo del programa VNU, publicado en el Huffingtonpost.