“Siento que alcancé mi misión como periodista. En esta asignación como Voluntaria ONU estoy cumpliendo el sueño de poder aportar a mi profesión y recuperar el rol del periodista en nuestro país”, Fabiola Rollano, voluntaria ONU nacional sirviendo como facilitadora de diálogo para PNUD Bolivia.
Según el informe del Latinobarómetro de 2018, más de la mitad de los latinoamericanos (56 por ciento) no confían en los medios de comunicación y el apoyo a la democracia es únicamente del 48 por ciento. Además, la contaminación de información “infopollution” y la mala información son herramientas que alimentan la polarización política, la desinformación y atentan contra la democracia.
En Bolivia, la anulación de los resultados electorales de 2019, la emergencia sanitaria por la pandemia de COVID-19 y la afectación económica, desembocaron en una triple crisis, donde los medios de comunicación jugaron un papel clave para la construcción de gobernabilidad.
Leni Matienzo, voluntaria ONU nacional sirviendo como especialista en facilitación de diálogo para PNUD Bolivia, afirma que la industria de la comunicación en Bolivia afronta una situación desafiante. “Los medios de comunicación son un pilar fundamental de la sociedad. Forman opinión, marcan la agenda y determinan de qué se trata y cómo se decide, sin embargo, no tienen las herramientas o el apoyo necesario para ejercer el rol democrático. Debemos identificar las debilidades que no les permite cumplir ese rol”, añade.
“En época de elecciones, cuando se monitorearon más de 250 horas, se pudo evidenciar que las noticias de los medios de comunicación no son neutrales”, continúa Nagera Vicente, encargada de Comunicaciones del PNUD Bolivia. “Sólo el 49 por ciento de las noticias fueron neutrales. Del 51 por ciento restante, tenemos un 28 por ciento de noticias positivas, y un 23 por ciento de noticias negativas que se orientan a la construcción de narrativas de desinformación”.
“Es importante que se discuta el rol de los medios dentro del fortalecimiento democrático, el fortalecimiento institucional y la prevención del conflicto”, señala Albertina Piterbarg, consultora internacional para Medios por la Democracia en PNUD Bolivia.
¿Cómo el voluntariado puede reducir la desinformación y fortalecer la democracia? Pues sirviendo de puente entre los actores locales y promoviendo espacios de diálogo e intercambio que superen las divisiones sociales.
Medios por la Democracia fue la iniciativa del PNUD Bolivia y Voluntarios ONU que apostó por involucrar a las personas afectadas en la solución y potenciar las capacidades locales. Bajo la modalidad TANDEM, se creó un grupo de trabajo donde 5 voluntarios y voluntarias ONU nacionales (María Rene Ibáñez, Leni Matienzo, Fabiola Rollano, Roger Yance Peláez y Denis Michel) con conocimiento y experiencia en su país en la temática, trabajaron bajo el liderazgo remoto de Albertina Piterbarg, consultora del roster de expertos y expertas internacionales del PNUD. Los equipos TANDEM son una forma de trabajo innovadora que reconoce el valor único de unir la experiencia y los conocimientos locales, con experiencia global, potenciando el intercambio transfronterizo y consolidando una red de expertos y expertas que trascienden fronteras, zonas horarias, idiomas y culturas.
La meta del equipo: promover y consolidar una cultura mediática democrática a través de la creación de espacios de diálogo entre la sociedad civil, los medios de comunicación y el Estado.
Con esfuerzos colectivos, se establecieron redes para mapear, analizar y diagnosticar la situación del periodismo profesional en Bolivia, logrando monitorear 191 medios de comunicación tradicionales (prensa, radio y televisión).
“El primer paso fue contactar a todos los encargados de los medios de comunicación, desde gerentes y propietarios, así como también periodistas,” dice María Rene Ibáñez, voluntaria ONU sirviendo como facilitadora de diálogo para los departamentos de Beni y Pando en PNUD Bolivia. “Esto nos permitió tener una base de datos totalmente actualizada de contactos y medios que están funcionando en el país. En la segunda parte, nos dividimos los medios de comunicación entre todos los y las voluntarias ONU, hicimos monitoreo manual y analizamos el tenor de las noticias en el proceso electoral, para ver su contribución a la democracia''.
“Fue un arduo trabajo, pero con el aporte de las y los voluntarios ONU se consiguieron productos muy importantes para analizar la situación mediática en el país. Obtuvimos bases de datos, entrevistas, monitoreo de medios y un Desk Review con el cual se analizaron datos cuantitativos y cualitativos” continúa Albertina Piterbarg.
Como los 340 Voluntarios y Voluntarias ONU sirviendo para PNUD en la región, apostemos por el voluntariado para atraer el mejor talento local y fortalecer las democracias latinoamericanas.
Este artículo fue escrito con la gentil contribución del Voluntario en Línea Sebastián Mahecha.