La violencia contra mujeres y niñas constituye un gran problema al que están haciendo frente Asociados para la Prevención y los Voluntarios de las Naciones Unidas en Asia y el Pacífico. Juntos están cambiando las percepciones de la gente y se encargan de la prevención de la violencia antes de que ocurra, en lugar de actuar solo cuando ya se ha producido.
Hasta un 68% de las mujeres y niñas de entre 15 y 49 años en Asia y el Pacífico se enfrentan a algún tipo de violencia durante su vida. Se trata de uno de los niveles más altos registrados en el mundo.
La violencia contra las mujeres existe en todas las sociedades. Abarca diferentes formas de abuso físico, sexual y psicológico. En 1993, la Asamblea General de la ONU preparó un marco para la acción contra este tipo de violencia. Más de 20 años después, una de cada tres mujeres todavía se ven afectadas por violencia física o sexual. Uno de los problemas que contribuye a esta gran prevalencia es que con mucha frecuencia ni siquiera se denuncia.
Responder a una llamada de socorro
Asociados para la Prevención (P4P, por sus siglas en inglés) es un programa conjunto del PNUD, del UNFPA, de ONU Mujeres y del programa VNU de ámbito regional cuyo fin es la prevención de la violencia contra mujeres y niñas en Asia y el Pacífico. El programa conjunto reúne y combina los puntos fuertes de las cuatro agencias de las Naciones Unidas, junto con los gobiernos y la sociedad civil, para promover e implementar más programas y políticas de prevención de la violencia. La fase 1 del programa (2008-2013) se centró en la investigación, el desarrollo de capacidades, la creación de redes y la comunicación para el cambio social. El programa se encuentra ahora en su segunda fase (2014-2017) que se centra en las intervenciones de prevención, el desarrollo de capacidades y la promoción de políticas.
Asociados para la Prevención es un programa regional que trabaja en el terreno con voluntarios del lugar que entienden la cultura de su propia comunidad y hablan el idioma. P4P moviliza a estos voluntarios para que actúen de puente entre la ONU, los gobiernos, organizaciones sin ánimo de lucro y comunidades locales. Seis Voluntarios ONU internacionales y nacionales prestan servicio como Coordinadores de proyecto con P4P en Bangladesh, Camboya, Indonesia, Tailandia y Viet Nam.
Actualmente, P4P está involucrando a hombres y niños en Bangladesh, Camboya, Indonesia y Viet Nam para ayudar a hacer frente a la violencia contra las mujeres en estas áreas. Al tratar las suposiciones y creencias que subyacen en la población masculina, los voluntarios se proponen la prevención directa con los hombres en lugar de intervenir una vez que una mujer o niña ha sufrido violencia de género.
Lo que he aprendido de otros voluntarios y de mi propia experiencia práctica es que cualquiera, con buena posición económica o no, con trabajo o sin él, puede echar una mano para ayudar a otros siempre y cuando ello les importe de verdad
Los voluntarios de P4P vienen de comunidades locales y se les anima a relacionarse con sus grupos para apoyar la movilización con el fin de evitar la violencia contra mujeres y niñas (VCMN) y el aprendizaje sobre ella. Mediante este trabajo, los voluntarios añaden un valor único a los programas de prevención y concienciación. También incluyen de forma proactiva a grupos marginados y vulnerables, permitiendo que sus voces sean escuchadas y empoderándolos para contribuir al objetivo de la comunidad de prevenir la VCMN.
Empoderar a las comunidades
En Bangladesh, los Voluntarios ONU de P4P han lanzado con éxito un programa de alcance comunitario para concienciar sobre la prevención de la VCMN. El esfuerzo en la participación por parte de la comunidad ha sido grabado y está disponible en línea, lo que ha permitido que el programa llegue a más personas en diferentes comunidades.
En Da Nang, Viet Nam, los Voluntarios ONU se han reunido con las comunidades para formar Clubs de Movilización Masculina que actúan de puente entre ciudadanos preocupados y aquellos afectados por la violencia contra las mujeres. Un ejemplo de ello constituye el empoderamiento de Tran Van Chuong quien gracias al apoyo del club pudo ayudar a una vecina después de que su marido la golpeara.
El Voluntario de las Naciones Unidas nacional Phan Thanh An se encargó de ayudar a formar estos clubs, que reciben el apoyo de ONU Mujeres. Los clubs se benefician de la presencia de un Voluntario ONU entrenado como facilitador que dirige los debates con los hombres del lugar y fomenta la reflexión sobre la VCMN.
Los Voluntarios de las Naciones Unidas unen a las comunidades
El programa Asociados para la Prevención ha ayudado a cambiar las comunidades y empoderar a las mujeres dentro de ellas. Los Voluntarios ONU han colaborado para unir diferentes agencias y comunidades facilitando el debate y aportando perspectivas locales (y continúan haciéndolo). Comunidades en Camboya e Indonesia también han visto aumentar las intervenciones apoyadas por el programa.
Los Voluntarios ONU son importantes y versátiles. Poseen la habilidad de unir diferentes grupos de personas incluyendo y permitiendo la participación de comunidades locales. Mediante el voluntariado, la gente del lugar se convierte en campeona del cambio dentro de su propia comunidad, ayudando así a aumentar el conocimiento y el apoyo para los retos importantes, como la prevención de la violencia contra mujeres y niñas.
Artículo traducido del inglés por el Voluntario en línea de la ONU Fernando Magallanes.