En el día de la fecha la Comisión Cascos Blancos y el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU) subscribieron un acuerdo de cooperación que permitirá a ambas organizaciones fortalecer su capacidad de respuesta, a través del voluntariado, a desastres y emergencias de manera rápida y efectiva.
En el día de la fecha la Comisión Cascos Blancos y el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU) subscribieron un acuerdo de cooperación que permitirá a ambas organizaciones fortalecer su capacidad de respuesta, a través del voluntariado, a desastres y emergencias de manera rápida y efectiva.
El compromiso rubricado durante el transcurso de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible facilitará la rápida y eficiente respuesta a situaciones de emergencias complejas y desastres socio-naturales en América Latina y el Caribe principalmente, pero también en el resto del mundo.
La Iniciativa Cascos Blancos basa su accionar en la asignación de voluntarios latinoamericanos a programas de atención a las emergencias que se verán enormemente beneficiados por este acuerdo explicó el Emb. Gabriel Fuks, Presidente de la Comisión Cascos Blancos. Las misiones de asistencia humanitaria en respuesta a los terremotos de Perú y Haití, en 2007 y 2010, como así también el trabajo llevado a cabo en la frontera libio-tunecina con los refugiados que emigraban producto de la crisis libia, son ejemplos de colaboración en terreno con el programa VNU, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones.
Cascos Blancos constituye una oportunidad para voluntarios de la región de asistir en el socorro post desastre y en los esfuerzos de recuperación. Cuenta con una base de datos de alrededor de 2.500 voluntarios con diferente perfiles de especialización que le permiten articular un equipo de respuesta altamente calificado y entrenado para actuar en conjunto con el Programa de Voluntarios de Naciones Unidas (VNU) en las 72 posteriores al desastre.
Durante la última década, la iniciativa argentina también ha desarrollado actividades de reconstrucción para el desarrollo y la prevención, a través de talleres para el fortalecimiento de voluntariados locales a nivel regional, nacional y local.
El programa VNU también posee una vasta experiencia en materia de prevención de desastres y reducción de riesgos, siendo esta un área prioritaria dentro del programa. El Marco de Acción de Hyogo reconoce explícitamente el valor agregado y contribución del voluntariado a la gestión del riesgo de desastres, particularmente en lo que se refiere al fortalecimiento de capacidades locales para prevenir y responder ante los mismos. El involucramiento del programa VNU en esta temática se centrará en el apoyo a países y situaciones donde se identifiquen riesgos y alta vulnerabilidad. Para mitigar los efectos de las crisis y afrontar sus efectos, el programa VNU trabaja en los niveles nacional y local para alentar y apoyar estrategias nacionales inclusivas y coherentes de prevención y reducción del riesgo. Descargar el comunicado de prensa (pdf)
El compromiso rubricado durante el transcurso de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible facilitará la rápida y eficiente respuesta a situaciones de emergencias complejas y desastres socio-naturales en América Latina y el Caribe principalmente, pero también en el resto del mundo.
La Iniciativa Cascos Blancos basa su accionar en la asignación de voluntarios latinoamericanos a programas de atención a las emergencias que se verán enormemente beneficiados por este acuerdo explicó el Emb. Gabriel Fuks, Presidente de la Comisión Cascos Blancos. Las misiones de asistencia humanitaria en respuesta a los terremotos de Perú y Haití, en 2007 y 2010, como así también el trabajo llevado a cabo en la frontera libio-tunecina con los refugiados que emigraban producto de la crisis libia, son ejemplos de colaboración en terreno con el programa VNU, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones.
Cascos Blancos constituye una oportunidad para voluntarios de la región de asistir en el socorro post desastre y en los esfuerzos de recuperación. Cuenta con una base de datos de alrededor de 2.500 voluntarios con diferente perfiles de especialización que le permiten articular un equipo de respuesta altamente calificado y entrenado para actuar en conjunto con el Programa de Voluntarios de Naciones Unidas (VNU) en las 72 posteriores al desastre.
Durante la última década, la iniciativa argentina también ha desarrollado actividades de reconstrucción para el desarrollo y la prevención, a través de talleres para el fortalecimiento de voluntariados locales a nivel regional, nacional y local.
El programa VNU también posee una vasta experiencia en materia de prevención de desastres y reducción de riesgos, siendo esta un área prioritaria dentro del programa. El Marco de Acción de Hyogo reconoce explícitamente el valor agregado y contribución del voluntariado a la gestión del riesgo de desastres, particularmente en lo que se refiere al fortalecimiento de capacidades locales para prevenir y responder ante los mismos. El involucramiento del programa VNU en esta temática se centrará en el apoyo a países y situaciones donde se identifiquen riesgos y alta vulnerabilidad. Para mitigar los efectos de las crisis y afrontar sus efectos, el programa VNU trabaja en los niveles nacional y local para alentar y apoyar estrategias nacionales inclusivas y coherentes de prevención y reducción del riesgo. Descargar el comunicado de prensa (pdf)