El pasado mes de abril, se celebró en Quetzaltenango el primer foro público para dar a conocer y visibilizar la problemática del cambio climático y aprender de las experiencias comunitarias de adaptación a estos cambios. El evento, titulado Foro Cambio Climático y Adaptación, ha contribuido a visibilizar el voluntariado como herramienta de movilización y acción local ante la necesidad de adaptación al cambio climático.
La Voluntaria de las Naciones Unidas nacional María Victoria García Quex, Asistente Técnica de Adaptación Comunitaria al Cambio Climático (CBA) con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), apoyó el desarrollo y la organización de este primer Foro, facilitando la participación de Voluntarios de las Naciones Unidas y voluntarios comunitarios como panelistas.
En el evento participaron también el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC).
Durante el evento, más de 200 personas escucharon presentaciones sobre el cambio climático y sobre cómo este afecta al país; analizaron las políticas y estratégicas nacionales para adaptarse al cambio climático; identificaron las oportunidades de adaptación que la cooperación internacional ofrece; y socializaron experiencias comunitarias incluyentes de trabajo voluntario para la adaptación al cambio climático.
El Voluntario de las Naciones Unidas internacional José Cabo, Asesor de Cambio Climático con el PNUD Guatemala, presentó el fenómeno del cambio climático, señalado que es un fenómeno irreversible cuyo impacto es distinto en cada país, en función de su vulnerabilidad. Guatemala es considerado sumamente vulnerable por su ubicación geográfica, alto nivel de pobreza, poco conocimiento de la problemática, debilidades estatales y densidad de población. El principal impacto del cambio climático se vive a nivel local.
Antes esta realidad, y en la búsqueda de soluciones viables, se pide la adopción de nuevos modelos de desarrollo incluyentes, así como el ejercicio de la ciudadanía local y mundial.
El voluntariado comunitario ofrece la oportunidad de llevar a cabo acciones concretas en las comunidades, facilitando la adaptación al cambio climático de forma práctica. El Fondo para el Medio Ambiente Mundial y el PNUD apoyan la implementación de la Adaptación Comunitaria al Cambio Climático (CBA) en Guatemala y en otros nueve países del mundo.
Petronila Zunun e Irma Mejía Bravo, promotoras voluntarias comunitarias del mismo proyecto, presentaron experiencias de adaptación al cambio climático en las comunidades indígenas de Pin Pin Tacana y Chocabj Sibinal, San Marcos, Guatemala.
Petronila compartió los retos y desafíos a los que se enfrenta su comunidad, incluso cambios inesperados nunca imaginados, como la primera nevada en las montañas de su comunidad en 2010. Explicó que, en coordinación con el Proyecto CBA, el voluntariado comunitario ha facilitado nuevas prácticas y beneficios como la reforestación, terrazas, viveros, barreras vivas, educación, organización y acción en la comunidad de Chocabj Sibinal.
El voluntariado es importante, porque damos nuestro tiempo para trabajar por la comunidad, explicó Irma al hablar de la inclusión que supone el voluntariado comunitario, en el cual participan jóvenes, adultos, hombres, mujeres y ancianos de su comunidad. Resaltó la importancia del voluntariado a pesar de que la comunidad no recibe remuneración, y señaló que la remuneración se encuentra en el medio ambiente y en el bien común de la comunidad Pin Pin Tacana.
Adaptamos, aprendemos, organizamos. No se puede detener el cambio climático, ¡pero sí nos podemos adaptar!, declaró Irma al concluir su presentación.
El Foro Cambio Climático y Adaptación fue un éxito de asistencia de más de 200 personas, entre otros representantes de organizaciones comunitarias, estudiantes universitarios y de nivel medio, docentes universitarios (privados y públicos), distintas instituciones del gobierno y organizaciones de cooperación internacional que se encuentran en la región suroccidental del país.