El programa VNU y el PNUD Colombia han puesto en marcha “Voluntarios por la Paz”, un proyecto que apunta a fortalecer las capacidades y la conciencia de jóvenes voluntarios y activistas acerca del proceso de paz, la educación para la paz y la reintegración.
Este año el tema del Día Internacional de la Paz es “Los Objetivos de Desarrollo Sostenible: los cimientos de la paz”. La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible es el nuevo plan de acción que están adoptando todos los países que se proponen erradicar la pobreza, proteger el planeta y lograr prosperidad para todos a través de asociaciones colaborativas.
La jornada internacional estará centrada en la interdependencia entre paz y desarrollo. Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible no se pueden alcanzar en contextos en los que la paz y la seguridad no están garantizadas, y al mismo tiempo es imposible crear las condiciones para la paz en sociedades que no afrontan de manera constructiva los retos del desarrollo.
En el esfuerzo por promover un enfoque holístico donde la paz no sea solamente la ausencia de guerra sino también la presencia de condiciones generadoras de bienestar para todos, el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU), en colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), está apoyando actividades sobre educación para la paz y la reintegración basada en la comunidad con la juventud de Colombia.
En medio del actual proceso de paz, la inminente firma del acuerdo de paz entre el Gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC supone un momento crucial. Pero muchos retos siguen en pie. La fase pos-acuerdo debe asegurar el fin de la violencia directa, pero también actuar como catalizador para generar las condiciones para la paz y el desarrollo sostenibles.
Con este espíritu, el programa VNU de forma conjunta con el PNUD han puesto en marcha “Voluntarios por la Paz”, un proyecto que apunta a fortalecer las capacidades y la conciencia de jóvenes voluntarios y activistas acerca del proceso de paz, la educación para la paz y la reintegración.
En cuatro regiones del país (Antioquia, Meta, Nariño y Norte de Santander) hay actuaciones de capacitación en las que los jóvenes de las comunidades están ampliando sus conocimientos sobre paz, participación juvenil y empoderamiento, así como sobre el voluntariado y los acuerdos de paz firmados en La Habana. Los jóvenes líderes y los voluntarios empoderados despliegan sus propios planes de acción que incitan a la paz en el país.
Al mismo tiempo, en Arauca, San José del Guaviare y Quindó, en estrecha colaboración con la Oficina del Alto Comisionado para la Paz en Colombia, bajo el lema de “Hagamos la Paz”, se han organizado festivales en los que cientos de estudiantes pudieron debatir y aprender acerca de los acuerdos de paz.
Los jóvenes participaron también en diferentes actividades culturales informales, como espectáculos de títeres sobre resolución de conflictos, juegos de rol sobre creación de la paz y dinámicas discusiones sobre voluntariado, jóvenes y paz.
Estas actividades contribuyen a “fortalecer la implicación y las capacidades de la sociedad civil en el proceso de consolidación de la paz” y a “ampliar la participación cívica y los diálogos participativos en los esfuerzos por sostener la paz”, resultados del Programa de Consolidación de la Paz Global del programa VNU.
El voluntariado tiene un impacto positivo porque empodera a los jóvenes voluntarios comunitarios como embajadores de paz, galvaniza el compromiso de la comunidad con el proceso de paz, y refuerza el capital social indispensable para una paz durable. Al encarnar el espíritu de la participación cívica, la reconciliación y el cambio positivo, no hay duda de que el voluntariado forma parte de los cimientos de la paz.
Por Romeral Ortiz Quintilla, Especialista del Programa Regional de Paz y Seguridad Ciudadana, Oficina Regional para América Latina y el Caribe del programa VNU.