Hoy, 5 de junio, se celebra en todo el mundo el Día Mundial del Medio Ambiente. La campaña de este año, Piensa Aliméntate Ahorra, destaca la gran cantidad de alimentos que se echan a perder cada día, y anima a todas las personas a reducir su huella ecológica.
Hoy el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU) presenta un extracto del Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo, El voluntariado y los desastres, que destaca el papel que desempeñan los voluntarios en las actividades destinadas a la reducción de desastres.
También señala que, en contra de la percepción popular, los pobres de ingresos participan en actividades de voluntariado en un porcentaje similar que las personas que no lo son. Al hacerlo, aportan sus activos (lo que incluye sus conocimientos, sus aptitudes y sus redes sociales) en su propio beneficio y en el de sus familias y comunidades. Los valores del voluntariado tienen una gran importancia en el fortalecimiento de la capacidad de los más vulnerables a la hora de lograr unos medios de subsistencia seguros, así como de mejorar su bienestar físico, económico, espiritual y social.
Este capítulo ha mostrado las diversas maneras en que las personas realizan tareas voluntarias en las fases de preparación, mitigación, respuesta y recuperación en casos de desastre. Ha quedado patente cómo esta acción se manifiesta de varias formas: acciones espontáneas de personas a nivel comunitario, voluntariado organizado con asociaciones y organizaciones a escala local y nacional, y voluntarios procedentes del extranjero.
Asimismo, se ha enfatizado que la implicación de los voluntarios ayuda a asegurar los valores fundamentales de solidaridad y un sentido de destino común, valores que favorecen enormemente la resistencia de las comunidades, como se refleja en las estrategias y programas para reducir el riesgo de desastres.
Para más información, le invitamos a leer El voluntariado y los desastres (en inglés), que es un extracto del Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo.