La Fuerza V moviliza a voluntarios para superar las barreras en Sri Lanka

La Fuerza V del programa VNU empodera a los voluntarios y une a las comunidades, creando un espacio para la comunicación entre los voluntarios y las entidades de las Naciones Unidas y reforzando la colaboración con miras a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Los voluntarios de la Fuerza V “descubren su entusiasmo” por el desarrollo de la comunidad

Incluir la igualdad de género entre las principales prioridades de la Agenda 2030

En 2014, en calidad de Voluntaria en línea de las Naciones Unidas, Karol Alejandra Arámbula Carrillo dirigió un proyecto en colaboración con la organización The Red Elephant Foundation, con sede en la India, el servicio Voluntariado en Línea del programa VNU y la iniciativa Encuesta mundial MI Mundo relacionada con la Agenda para el Desarrollo después de 2015, que tenía por objeto incluir la igualdad de género entre las principales prioridades del desarrollo internacional.

Karol Alejandra Arámbula Carrillo (México) ha colaborado como Voluntaria en línea de las Naciones Unidas desde 2011. Una de sus motivaciones para unirse al servicio Voluntariado en Línea del programa VNU era el deseo de ayudar a las organizaciones de otros países en su labor, en particular en el ámbito de la igualdad de género. 

La descentralización en la toma de decisiones mejora los servicios públicos en comunidades de Kenya

Con 40 Voluntarios ONU nacionales desplegados en 37 condados y dos instituciones nacionales, el Apoyo Integrado al Proceso de Descentralización en Kenya (2014-2018) mejora los servicios públicos mediante la inclusión de las comunidades locales en los procesos de toma de decisiones a lo largo y ancho del país.

La buena gobernanza es esencial para la prestación de servicios públicos

Mediante la descentralización de la toma de decisiones y garantizando la participación local, el Proyecto de Descentralización, gestionado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en colaboración con el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU), ONU Mujeres y oficinas de los gobiernos central y regionales de Kenya, promueve la colaboración entre las comunidades locales y los proveedores de servicios públicos a nivel nacional. 

Romper con los prejuicios sexistas en Nepal

Inmediatamente después del terremoto que azotó Nepal en abril de 2015, la ingeniera civil Anima Dhakal llegó a Karthali, en el distrito de Sindhupalchowk, para colaborar como Jóven Voluntaria de la ONU.

Al igual que otras doce mujeres que colaboraron como ingenieras en las operaciones de demolición y gestión de desechos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Anima puso sus habilidades al servicio de las áreas afectadas por el terremoto en un campo tradicionalmente dominado por hombres.

“La ingeniería es para los niños, las niñas tienen que estudiar administración y trabajar en un banco”, recuerda que le dijo su tío años atrás cuando le pidió consejo sobre qué carrera elegir.

Un Voluntario de la ONU financiado íntegramente por Corea ayuda a Timor-Leste a adoptar acciones climáticas

Es significativo que la primera imagen que le viene a la mente al Voluntario de las Naciones Unidas Sung-gil al evocar Timor-Leste sea el calor sofocante que sintió al bajarse del avión procedente de su país de origen, Corea, y pisar el asfalto del aeropuerto de Dili. Aquel día de febrero de 2016, Sung-gil se presentó a su misión como Voluntario de las Naciones Unidas Especialista en Medio Ambiente con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Pronto estaría llevando a cabo un sinfín de tareas encaminadas a ayudar a los timorenses a adoptar acciones frente al calentamiento global.

Empoderar a las mujeres de Malawi en todas sus facetas

Desde marzo de 2016, Andrea Medaas, natural de Noruega, está trabajando como Joven Voluntaria de la ONU en la Oficina Nacional de ONU Mujeres en Lilongwe, Malawi, destinada a la unidad programática de empoderamiento económico de las mujeres. Allí, ella y sus colegas trabajan para conseguir la meta final de garantizar que las mujeres de Malawi se empoderen económicamente y que se beneficien del desarrollo.

En su posición, trabaja en diferentes proyectos centrados en el empoderamiento de las mujeres en todas sus facetas. Una semana puede estar sobre el terreno monitorizando una formación en negocios e iniciativa empresarial para miembros del grupo productivo, y la siguiente puede estar representando a su equipo programático en una formación sobre Género y Cambio Climático para miembros del parlamento. Una cosa es segura: siempre hay algo que hacer.

En Sikkim, India, el voluntariado promueve ocupaciones sostenibles para las mujeres y los jóvenes

“Tenemos que movilizar a los jóvenes y las mujeres para que sean parte de la acción”, explica Sangita Dahal, Voluntaria ONU y Coordinadora juvenil de distrito en Namchi, estado de Sikkim, en el norte de la India. El Sikkim meridional es una de las regiones con mayor crecimiento del país y en el distrito de Namchi las mujeres desean adquirir habilidades y desempeñarse en ocupaciones que les permitan ser autosuficientes. Los jóvenes son considerados vulnerables a actividades antisociales como el consumo y el tráfico de drogas.

Sangita describe el proyecto que gestiona como voluntaria: “Doce jóvenes voluntarios comunitarios llevan adelante actividades y campañas para crear conciencia acerca de los grupos femeninos de autoayuda, para impartir conocimientos básicos de finanzas, para difundir la participación juvenil en los planes gubernamentales, organizar donaciones de sangre, campos de salud”.

Proteger a los desplazados, incluidas mujeres y niñas

Serena es una firme partidaria de la igualdad de género que integra una perspectiva de género en las actividades que lleva a cabo. ¿Cuál ha sido su momento más memorable hasta el momento? Cuando vio a dirigentes tradicionales oponerse a los matrimonios precoces y forzados en sus comunidades de Shabunda, una remota zona de South Kivu.

El Día Internacional de la Mujer nos da la oportunidad de reconocer las aportaciones vitales que hacen a diario las mujeres y de señalar los desafíos que nos quedan todavía por delante para conseguir la igualdad de género. 

Destacar el papel de las mujeres y su participación

“El simple hecho de que las mujeres participen en la actividad económica no siempre significa que tengan un trabajo digno o que su contribución sea plenamente reconocida.” Anita Bianchi es una Joven Voluntaria de las Naciones Unidas en el desarrollo del sector privado del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Sudán. Su asignación está financiada por el Gobierno de Italia.

Sudán es un país vasto y diverso con muchas facetas. El paisaje es, en sí mismo, evocador de esta diversidad: Sudán va desde calurosos desiertos a zonas verdes cerca del Nilo. La misma diversidad se encuentra en las caras de las personas que te encuentras. Mi experiencia al involucrarme con mujeres como parte de mi asignación también ha sido bastante diversa.

La experiencia más significativa de mi vida

Ser Voluntario ONU ha sido una de las experiencias más significativas de mi vida hasta el momento, y eso dice mucho teniendo en cuenta que tengo más de ochenta años. A principios de los 90, después de haber sacado adelante a una familia, y ya al final de una exitosa carrera empresarial y bien acomodado con la jubilación, la inesperada emoción y humildad de salir y cambiar la vida de las personas me mostró que la vida siempre puede traer sorpresas.

Ser Voluntario de la ONU ha sido una de las experiencias más significativas de mi vida hasta el momento, y eso dice mucho teniendo en cuenta que tengo más de ochenta años. A principios de los 90, después de haber sacado adelante a una familia, y ya al final de una exitosa carrera empresarial y bien acomodado con la jubilación, la inesperada emoción y humildad de salir y cambiar la vida de las personas me mostró que la vida siempre puede traer sorpresas.

En una reunión con líderes del ACNUR y asociados, tuve una conversación que me llevó al programa VNU.